La Iglesia Católica en Honduras, por medio de la Pastoral Garífuna, viene realizando una acción concreta de evangelización y promoción humana integral del pueblo Garífuna, para que, desde su identidad cultural, viva el proyecto del Reino de Dios sobre su existencia y lo comparta con toda la humanidad.

De esta manera, se sueña con una Iglesia con rostro propio, que incluya la espiritualidad Garífuna, reconozca su identidad, favorezca la cohesión de la organización  y el mejoramiento de las condiciones de la vida del pueblo Garífuna.

Escudriñémonos a luz de las palabras reales y convincentes de la V conferencia episcopal latinoamericana. (CELAM V, 91. “Los indígenas y afroamericanos emergen ahora en la           sociedad y en la Iglesia. Este es un “kairós” para profundizar el encuentro de la  Iglesia con estos sectores humanos que reclaman el reconocimiento pleno de sus derechos          individuales y colectivos, ser tomados en cuenta en la   catolicidad con su cosmovisión, sus valores y sus identidades particulares, para vivir un nuevo Pentecostés eclesial.