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Un pueblo, que se originó del mestizaje entre los negros africanos libres con el indígena Caribe Arawak. Idioma propio; GARIFUNA, de la familia lingüística Caribe – Arawak 90% Una continuidad histórica ancestral; UN PUEBLO NACIDO DEL MAR; desarrollados en zonas marítimas y agrícolas; amantes de la PAZ
La historia de los garífunas empieza en las costas de África Occidental, cuando los gobiernos europeos tenían ya muy bien organizado el comercio de esclavos. En uno de los viajes de los barcos negreros en 1635 naufragaron dos de estos frente a las costas de la pequeña isla de San Vicente, en el arco que forman las Antillas Menores.
La historia de aquellos africanos, que venían a ser esclavos de otras islas del Caribe, cambió inesperadamente. En San Vicente, isla que se disputaban Francia e Inglaterra, vivían los caribes rojos, pueblo surgido del cruce de los indígenas caribes, habitantes originarios y los indígenas Arawakas llegados de América del Sur; quienes acogieron y convivieron con los africanos sobrevivientes de aquel naufragio.
De ese mestizaje surgieron los antepasados de los garífunas; quienes fueron arrancados violentamente de sus territorios; “Isla de San Vicente” y al revelarse ante las injusticias del abuso a su dignidad, destrucción de sus viviendas y la muerte de sus seres queridos; los encarcelaron en una isla desierta de Balliceaux por 6 meses en 1796 donde vivieron la peor ignominia de su historia; murieron más de la mitad de hambre, sed, enfermedad, pestes y otras inclemencias de la naturaleza ya que ese lugar no era apropiado para la supervivencia ni animal, ni humana.
El pueblo Garífuna es una cultura ancestral que tiene su origen en la unión de tres culturas es intercultural; africana, Arawak y caribes; tiene su propia lengua, sistema de creencias, alimentos y prácticas ancestrales de la agricultura, pesca, danzas y cantos que se unen a su espiritualidad; del “Au Buni; Amürü Nuni”( que encuentra su origen y significado en el mandamiento del amor. (Juan 13:34) “Amor a Dios y al prójimo”.
Don de Dios que guía, alimenta, ilumina y fortalece al pueblo Garífuna en su peregrinación desde su origen; donde se cultiva una vida rica y profunda en BABA (Dios Madre y Padre) a través de la vivencia diaria)el pueblo una continuidad histórica ancestral, con fuerte Sentido de vida comunitaria, festiva, acoger, que celebra y comparte su ser y hacer con los demás y la Naturaleza. Es un pueblo salvado de las aguas saladas; se caracteriza por su alegre acogida y protección a los demás de manera especial al peregrino.
En el 2001 la UNESCO declaró la cultura Garífuna como “Patrimonio Intangible de la Humanidad”. Es ancestralmente matrifocal, las mujeres ancianas son mayormente las herederas de los conocimientos y sabidurías ancestrales espirituales quienes piden fuerza, luz y protección a Dios y la compañía de sus ancestros para luchar en las adversidades, por la conservación de sus territorios, valores eutécticos y mantener la FE, VIDA Y CULTURA heredada por Dios por medio de sus ancestros; son las que mantienen la fuerza del estilo de vida del “Au Buni; Amürü Nuni” espiritualidad del buen samaritano que acoge, respeta y valora.(Sentido comunitario, festivo; acogedor, celebrativo que comparte la vida con los demás y la Naturaleza, infunde alegría protege al peregrino como imagen de Dios).
Los Garifunas actualmente habitan en 50 comunidades hondureñas, seis en centros urbanos de Belice, dos comunidades de Nicaragua y dos en Guatemala. Se estima que hay unos 250 mil Garífunas en Honduras y más de 100 mil que emigraron hacia Estados Unidos y otros países incluso a la Isla de San Vicente de donde fueron exiliados.
Un pueblo; que en sus 225 de estar en Centro América se han forjado en la resistencia a la destrucción de sus territorios, valores eutécticos, lengua y cultura ancestral; característica que les acompaña y les da fuerza a su contribución humanitaria y espiritual condensadas en el “Au Buni; Amürü Nuni”; (Espiritualidad del Buen samaritano) que encuentra su origen y significado en el mandamiento del amor; sueño de Dios Madre y Padre para su pueblo GARIFUNA en el proceso de la su historia de salvación.